De la teoría y la práctica a un espacio de pertenencia
De la teoría y la práctica a un espacio de pertenencia
Adriana conoció a ANDHES mientras estudiaba en la universidad y buscaba un lugar donde llevar a la práctica los conocimientos adquiridos en su formación académica. Lo que en un inicio fueron expectativas de aprendizaje y experiencia en territorio, se transformó en una convicción: “ANDHES superó mis expectativas, porque ya no es solo un espacio de identificación, sino una forma de pensar y de vivir que atraviesa mi día a día”, nos comparte Adri.
Lo que más valora de su recorrido es la posibilidad de sentirse parte: “En ANDHES encontré un grupo con el que comparto ideales y formas de mirar la realidad. No solo me dio herramientas profesionales, también me permitió construir vínculos y reafirmar mis convicciones”. Esa pertenencia la llevó a involucrarse en proyectos diversos: monitoreo de derechos, talleres de formación, acompañamiento en contexto de privación de la libertad y la escritura de iniciativas hacia el interior del equipo.
Aprendizajes que marcan, compromisos que se renuevan
Adriana nos manifiesta que entre los aprendizajes y momentos más significativos, recuerda la potencia de los encuentros y talleres con las orientadoras legales comunitarias que se realizaron desde el área de género durante varios años, donde ella fue partícipe y en ellos la experiencia de haber coordinado, planificado y ejecutado espacios formativos: “Siempre sentí que las puertas estaban abiertas y que podíamos aportar desde nuestras fortalezas. Nunca escuché un ‘no’, y eso es algo muy valioso”. Trae también como experiencia significativa, el trabajo colaborativo en momentos críticos de la provincia, como fué el caso de la Reforma parcial de la Constitución provincial en el año 2023.
Hoy, después de cuatro años de voluntariado, Adriana afirma que ANDHES ocupa un lugar fundamental en su vida: “Es mi territorio, un espacio necesario donde me siento cómoda, comprometida y con ganas de seguir aprendiendo”. Su decisión de continuar se sostiene en la certeza de estar en un espacio colectivo donde se respeta la diversidad, se valora el trabajo colaborativo y se lucha por los derechos humanos desde la práctica cotidiana.
Una invitación a dar el paso
A quienes tienen ganas de involucrarse pero aún dudan, Adriana les deja un mensaje: “Animarse es clave. ANDHES no solo te permite llevar la teoría a la práctica, también te ofrece la oportunidad de crecer, de construir con otras disciplinas y de encontrarte con personas que comparten tu compromiso social. Es un espacio donde siempre se aprende y donde el aporte de cada uno encuentra lugar”.